Viaje invernal por Alemania. 4ª parada: WEIMAR

En este pequeño tour que aquí presento pude visitar, entre otras localidades, Berlín, Quedlinburg, Leizpig, Weimar, Erfurt y Eisenach. El frío fue el protagonista inconfundible de este viaje, con temperaturas que alcanzaron los -17ºC. Mi amigo Raúl y el pequeño Fiat Panda que alquilamos fueron los otros protagonistas del viaje.

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Cuarta parada: WEIMAR

La ciudad está situada en el estado de Turingia, en el centro-este del país. Pese a sus reducidas dimensiones (cuenta con poco más de 60.000 habitantes), la ciudad es una auténtica joya. En ella se mezclan historia y cultura a partes iguales, de ahí que esté considerada ciudad Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde el año 1998. Además un año después de dicho galardón fue distinguida como Capital Europea de la Cultura.

"Weimar clásico" es el conjunto de edificaciones declaradas Patrimonio de la Humanidad. La elección se basó en la alta calidad artística de los edificios y parques de la ciudad así como de sus alrededores. Además Weimar fue el centro del movimiento Bauhaus, una escuela de diseño, arte y arquitectura muy reconocida a nivel mundial y que fue fundada en el año 1919.

Fachadas clásicas

Por momentos todo parece clásico

El centro histórico de Weimar es sin duda el lugar de mayor interés. La plaza central, con su imponente ayuntamiento, es el corazón de esta pequeña ciudad. En ella en invierno se realiza el mercado navideño, una bonita costumbre que parece haber ido extendiéndose por todo el país.

Con Raúl frente al mercado navideño de Weimar

Ayuntamiento

El castillo, el teatro principal, la casa de Goethe y la de Schiller (afamados poetas y dramaturgos), la nueva biblioteca, la universidad y algunas galerías y museos, son otros de los lugares de interés.

Castillo de Weimar

Torre y acceso principal

Teatro principal Goethe y Schiller

Una de las mejores panorámicas de la ciudad se puede obtener desde la iglesia San Jacobo, edificación levantada allá por el siglo XII. Alcanzar su cota más alta por escalones de madera supone todo un logro.

Iglesia San Jacobo

Atractivo interior de la iglesia San Jacobo

Panorámica de Weimar desde la torre de la iglesia

Si bien el patrimonio cultural que ofrece Weimar es importante, no menos lo es la historia de la ciudad. Durante el periodo comprendido entre 1919 y 1933 se hablaba de "República de Weimar", pues fue allí donde se redactó la constitución de la República al considerarse la ciudad de Berlín como peligrosa, después de los disturbios callejeros que se sucedieron tras la revolución de 1918.

La II Guerra Mundial ocasionó grandes destrozos en la ciudad, pero la mayor parte de su centro histórico pudo ser recontruído.

Además Weimar albergó un campo de concentración al noroeste de la ciudad conocido como Buchenwald.

Viaje invernal por Alemania. 3ª parada: LEIPZIG

En este pequeño tour que aquí presento pude visitar, entre otras localidades, Berlín, Quedlinburg, Leizpig, Weimar, Erfurt y Eisenach. El frío fue el protagonista inconfundible de este viaje, con temperaturas que alcanzaron los -17ºC. Mi amigo Raúl y el pequeño Fiat Panda que alquilamos fueron los otros protagonistas del viaje.

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Tercera parada: LEIPZIG

Perteneciente al estado de Sajonia, es una urbe situada en el este del país, ligeramente en el centro norte del mismo. Se trata de la segunda ciudad más poblada de Alemania, sólo por detrás de Berlín. Cuenta con más de medio millón de habitantes y, pese a no ser una ciudad excesivamente turística, cuenta con una serie de lugares de interés turístico. Entre ellos destaca el antiguo ayuntamiento (s.XVI), uno de los edificios más atractivos del renacimiento alemán y que actualmente alberga el museo de historia de la ciudad. 

Durante mi visita un dinámico mercado navideño se celebraba a sus pies. La gente se amontonaba en los pequeños puestitos de comida y artículos regionales que inundaban la plaza, al tiempo que jóvenes bandas musicales animaban la jornada haciendo olvidar, por momentos, el frío.

Mercado navideño de Leipzig frente al antiguo ayuntamiento

Dos jóvenes músicos ataviados con trajes tradicionales locales

En el interior del mercado navideño

Actualmente existe un nuevo ayuntamiento levantado a comienzos del siglo XX sobre los cimientos del antiguo castillo de Pleibenburg y que es sede de la administración de la ciudad. Lo más destacado de él es su torre de 110m. de altura, lugar desde donde se puede disfrutar de una vista panorámica sobre la ciudad.

Torre del nuevo ayuntamiento

Otros de los puntos atractivos de la ciudad son sus dos iglesias principales. Por un lado la de Santo Tomás, con su torre de 68m. de altura, que data del siglo XIV-XV. Por otro la iglesia de San Nicolás, la más grande y antigua (s.XII-XIII) de la Leipzig y en cuyo interior se marcó el camino hacia la reunificación en 1989. Ha sido sometida a varios procesos de restauración a lo largo de los siglos y contiene elementos de estilo románico, gótico, renacentista, barroco y clásico.

Iglesia de Santo Tomás

Iglesia de San Nicolás

El monumental edificio del antiguo tribunal de justicia llama la atención por sus grandes dimensiones. Su estado actual se debe a una profunda restauración llevada a cabo en el año 2002.

Antiguo tribunal de justicia

El impronunciable "Völkerschlachtdenkmal" (monumento a la batalla de los pueblos), levantado a las afueras de la ciudad, es un monumento dedicado a la Batalla de Leipzig de 1813 (comocida como Batalla de las Naciones), en la que se enfrentaron las tropas napoleónicas a una coalición de naciones formada por Prusia, Rusia, Suecia y Austria.

"Völkerschlachtdenkmal"

 Visto de cerca

Tras un paseo por la zona universitaria fuimos a casa de mi amigo Matthías, chico alemán con el que viví un año en Valladolid. Allí cenamos unas pizzas acompañadas de buena cerveza local.

 Matthías y su inseparable bicicleta

 A veces avanzar era casi imposible 

 Cenando en la cocina de Matthías

Viaje invernal por Alemania. 2ª parada: QUEDLINBURG pasando por WOLFSBURGO

En este pequeño tour que aquí presento pude visitar, entre otras localidades, Berlín, Quedlinburg, Leizpig, Weimar, Erfurt y Eisenach. El frío fue el protagonista inconfundible de este viaje, con temperaturas que alcanzaron los -17ºC. Mi amigo Raúl y el pequeño Fiat Panda que alquilamos fueron los otros protagonistas del viaje.

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Segunda parada: QUEDLINBURG (pasando por Wolfsburgo)

Quedlinburg es un paraíso para todo aquél amante de la arquitectura medieval. Se trata de una localidad de  22.000 habitantes ubicada en el centro de Alemania, a orillas del río Bode, en es estado de Sajonia Anhalt. El encanto de sus pequeñas calles y de sus más de 1200 casas construidas con entramado de vigas de madera y milimétricamente restauradas, hacen de este sitio uno de los lugares Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, dentro de Alemania. Además alberga uno de los palacios imperiales más importantes de la Edad Media.

Como añadidura comentar que la ciudad apenas sufrió pequeños daños durante la II Guerra Mundial, algo que sin duda ayudó a que Quedlinburg mantenga el esplendor actual.

Si bien se puede llegar hasta allí en tren, fue en un pequeño coche alquilado como lo hice yo, junto a mi amigo Raúl, provenientes de Wolfsburgo, donde pudimos ver un partido de la Bundesliga (primera división alemana de fútbol). Ya en Quedlinburg una simpática familia con la que contacté vía Couchsurfing nos alojó.

Hitler pretendía construir la fábrica más grande de Europa (actual Volkswagen)

Volkswagen Arena de Wolfsburgo

Interior del estadio

 Rueda de prensa

 Plaza del ayuntamiento de Quedlinburg con el mercado navideño

A primerísima hora de la mañana, aún con el mercado cerrado

Típica construcción de la zona

 

Una de las callejuelas de Quedlinburg

Las casas parecen reposar unas sobre otras

Trasera del ayuntamiento

 

Práctico medio de transporte y de bajo consumo

Vecinos de Quedlinburg

Ascendiendo al palacio

Vista del palacio imperial desde su base 

Colegiata de San Servasio, junto al palacio imperial

Panorámica de la ciudad desde el palacio

Torre de medieval de Quedlinburg

Pequeñas viviendas junto a la iglesia de San Nicolás

Iglesia de San Nicolás

Con la familia que nos alojó (Quedlinburg)

Viaje invernal por Alemania. 1ª parada: BERLÍN

En este pequeño tour que aquí presento pude visitar, entre otras localidades, Berlín, Quedlinburg, Leizpig, Weimar, Erfurt y Eisenach. El frío fue el protagonista inconfundible de este viaje, con temperaturas que alcanzaron los -17ºC. Mi amigo Raúl y el pequeño Fiat Panda que alquilamos fueron los otros protagonistas del viaje.

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Primera parada: BERLÍN

La capital alemana supuso el punto de partida. Situada a escasos 70 kilómetros de la frontera con Polonia, es la ciudad más poblada del país con 3,5 millones de habitantes. Es también un estado autónomo y cuenta con doce distritos, divididos a su vez en barrios.

El primer lugar de interés que visitamos fue la espectacular estación central de trenes (inaugurada en 2006 con vistas al Mundial de fútbol), un proyecto donde se invirtieron de 900 millones de euros. 

Esperando al tren en el aeropuerto internacional de la capital

 Estación central de Berlín y torre de televisión Fernsehturm

No muy lejos de allí se encuentra el barrio medieval de San Nicolás, zona que sufrió una gran devastación por los bombardeos acaecidos durante la II Guerra Mundial. Su imponente iglesia es su principal atractivo.

Fachadas típicas del barrio de San Nicolás

 Iglesia de San Nicolás

Sin alejarnos del centro y junto a la conocida Alexanderplatz se encuentra la torre de televisión Fernsehturm, un punto de referencia conocido entre los berlineses y que cuenta con 368 metros de altura.

En Alexanderplatz con Raúl, frente a la torre de la televisión Fernsehturm

Y a pocos metros y frente al ayuntamiento nos encontramos con uno de los puntos más ambientados en estas fechas: el típico mercado navideño. Se trata de algo muy característico en todas las localidades de cierto tamaño del país y donde las salchichas, la cerveza y los vinos calientes no faltan.

Mercado navideño

 Noria gigante y pista de hielo junto al mercado navideño

Otro de los puntos que no debe ser pasado por alto es el muro de Berlín, construido en el año 1961 para separar las dos partes de la ciudad y evitar así la emigración de quienes vivían en el lado este al lado oeste. Fue en el año 1989 cuando la República Democrática Alemana (RDA), autora de la construcción del muro, aceptó la libre circulación de ciudadanos, por lo que los 144 kilómetros de pared dejaron de suponer un obstáculo. Hoy en día aún perduran varios tramos (puede verse uno de 1'3km) e incluso algún que otro paso fronterizo muy bien conservado. 

Además de su valor histórico, el muro posee una espectacular colección de murales, todos ellos rindiendo homenaje al mismo lema: la libertad.

Junto al inicio de un tramo del muro en el barrio de Kreuzberg

 Tienda de souvenires del muro (pueden comprarse incluso pedazos del muro perfectamente documentados)

 El icono del muro; el beso entre Breznev (URSS) y Honecker (RDA)

 Murales...

 ... Y más murales

...

 Frente a un mural que recuerda el holocausto judío

Muy cerca del tramo del muro que puede verse entre los distritos de Kreuzberg y Friedrichshain se encuentra el antiguo puente de Oberbaum. Éste se extiende sobre el río Spree y antaño fue un paso fronterizo que únicamente podía ser utilizado por los peatones.

Puente Oberbaum

A escasos metros del puente se halla el estadio O2, un moderno complejo deportivo que acoge partidos de deportes variados como el hockey, el baloncesto o el balonmano entre otros. En 2009 albergó la famosa "Final Four" de la Euroliga de baloncesto.

Estadio O2

Otros lugares con encanto son los asentamientos hippies y de ocupas que existen desperdigados por la ciudad. Si bien el más conocido es el de Tacheles (edificio de varias plantas donde los ocupas son auténticos genios), no es el único. En el barrio de Kreuzberg existe otro pequeño "centro artístico polivalente" donde se exponen más obras de arte.

Punto de acceso al asentamiento ocupa de Kreuzberg

 Edificio de Tacheles

 Creaciones artísticas en el patio interior de Tacheles

 Acceso a una galería de arte en el interior de Tacheles

 Pasillos de Tacheles

 Obras de arte en la última planta de Tacheles

 Escaleras (Tacheles)

A escasos 10 minutos de Tacheles se encuentra el doom o la catedral protestante de Berlín, un edificio con una arquitectura peculiar. Fue construida entre finales del siglo XIX-XX donde precisamente antes hubo una catedral barroca. Finalizada la II Guerra Mundial hubo de ser restaurada debido a que fue dañada tras los bombardeos.

El río Spree a su paso junto a la catedral (I)

 El río Spree a su paso junto a la catedral (II)

 Fachada principal de la catedral

Reflejo de la catedral y trozos de hielo en el río Spree

Junto a la catedral encontramos la Isla de los Museos, uno de los conjuntos museísticos más importantes del mundo. Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, está formado por cinco museos de prestigio internacional que albergan colecciones de arte y arqueológicas, entre otras.

Altes museum de Berlín (museo antiguo de exposiciones)

Museo de Pérgamo (antigüedades de Oriente)

Columnas alrededor del museo de Pérgamo

El río Spree rodeando el museo de Pérgamo

Exterior del "museo nuevo" y torre de la televisión, al fondo 

La puerta de Brandeburgo es otro de los símbolos de Berlín (y de Alemania). Está situada en el centro de la ciudad, concretamente al final del bulevar más importante de la ciudad: el Unter den Linden. Se trata de una antigua puerta de entrada a Berlín, al "Nuevo Berlín" de la época, y son varios los sucesos acaecidos en la ciudad que están ligados a ella. Sin ir más lejos es la imagen que puede verse en las monedas de 10, 20 y 50 céntimos de euro de Alemania.

Sujetando un vino caliente en la plaza París

 Puerta de Brandeburgo

Junto a la puerta de Brandeburgo se encuentra el Reichstag, otro edificio que sufrió serios daños tras la II Guerra Mundial pero que al igual que muchos ya ha sido restaurado. De hecho los muros exteriores son los originales, pero su interior es totalmente nuevo. Actualmente es la sede del parlamento federal y cada 5 años la Convención Federal se reúne allí para elegir presidente. Está permitido el acceso a la cúpula, desde donde se puede disfrutar de una privilegiada vista de la ciudad.

Edificio Reichstag rodeado de nieve

No muy lejos del Reichstag se encuentra el Memorial del Holocausto, donde 2711 bloques de hormigón recuerdan los horrores del Holocausto judío por parte del nazismo. Es realmente impactante.

Memorial del Holocausto sepultado por la nieve

 Abriéndome hueco entre los bloques de hormigón

Ya en las afueras de Berlín, al oeste de la ciudad, se encuentra la iglesia memorial (Kaiser-Wilhem) conocida también como "iglesia del recuerdo" (Gedächtniskirche). Fue bombardeada durante la II Guerra Mundial y únicamente sobrevivió una gran torre que ha sido conservada sin restaurar hasta nuestros días para recordar así las consecuencias de la guerra. En lo más alto se conserva la campana de la libertad, otro de los símbolos de la ciudad.

Junto a la torre se ha construido un edificio moderno con el propósito de poder oficiar las misas en su interior.

"Iglesia del recuerdo" en obras y torre moderna (2º plano)

Estado de la iglesia del recuerdo (foto internet)

Saliendo de la ciudad se encuentra la columna de la victoria (Siegessäule), un monumento de 69 metros de altura ubicado en el parque Tiergarten. Conmemora tres victorias alemanas a lo largo del siglo XIX y está coronada por la estatua de Niké, la diosa griega de la victoria. Puede accederse a su cúspide, desde donde se obtiene una magnífica panorámica de la ciudad.

Alrededor de ella se han celebrado cantidad de ediciones del festival de música electrónica Love Parade, donde miles de personas se congregaban para disfrutar de la música a todo volumen. Dicho festival no se celebra desde el año 2010 debido a una tragedia ocurrida en Duisburgo, ciudad que se estrenaba como sede.

Columna de la victoria, en obras

Imagen aérea de la aglomeración de gente en una edición de la Love Parade (foto internet)

Por último, y antes de dejar atrás definitivamente la capital alemana, tuvimos ocasión de pasar junto al Estadio Olímpico de Berlín, un complejo multiusos con capacidad para 74.220 espectadores y donde actualmente juega sus partidos de fútbol el Hertha BSC Berlín, principal equipo de la ciudad.

Estadio Olímpico de Berlín

Interior del Estadio Olímpico de Berlín (foto internet)