viernes, 23 de abril de 2010

Navidades = Semana de Premier (26/XII/09)

Amanecemos en Londres. Es muy pronto, pero hemos de llegar a Liverpool. Hoy es día de fútbol, el primero de los seis partidos que vamos a presenciar, y pese a que es tarde (20,30h), nada mejor que llegar con tiempo y aprovechar bien el día.
Partimos a primera hora hacia Stoke-on-Tren, ciudad a caballo entre Londres y Liverpool. No tiene nada de especial, pero le dedicamos un paseo por su centro peatonal.
Antes de marchar, aprovechamos para comer algo, y dadas las 15h, salimos hacia Liverpool, a donde llegamos a media tarde (17,30h).

Sea la ciudad que sea, siempre en algún rincón se respira fútbol (Stoke)

Lo primero es asegurarnos de las entradas, así que nos acercamos a Anfield, confirmamos nuestras acreditaciones y nos dejamos llevar por el ambiente "pre-partido". Los hooligans se dejan ver por todas partes y no cesan de entonar cánticos con los nombres de sus jugadores, de su equipo... Las cervezas y los perritos calientes se hacen los protagonistas de los prolegómenos del partido, y mientras la gente entra rápidamente en calor, Rober y yo aprovechamos para fotografiarnos con la estatua de "Bill" Shankly (el que antaño fuera posiblemente uno de los más famosos y reputados entrenadores británicos allá por los años 60 y que consiguió llevar al Liverpool a lo más alto tanto en Inglaterra como en Europa) así como para visitar la tienda del equipo, algo así como una galería dedicada principalmente a las figuras de Torres y Gerard. Camisetas, figuras, souvenires...

This is Anfield
Junto a "Bill" Shankly

19,45h: Accedemos al estadio. Nos conducen hasta el palco de autoridades, nos invitan a un suculento buffet donde no falta de nada y disfrutamos con unos vídeos acerca de la historia de "los reds".

Tomando posición en Anfield
Frente a "The Kop", la grada que más se hace sentir de todas

20,30h: Tras presenciar el calentamiento de uno y otro equipo y percatarnos que tanto Reina como Torres salen de inicio, el partido se dispone a dar comienzo. Estamos alucinados. El estadio, las butacas de madera cuidadas hasta el último detalle... Pero algo echamos de menos. Y de pronto, el himno. "You never walk alone" ("Nunca caminarás solo") comienza a escucharse. Al poco de empezar el partido, todo el campo grita al unísono. Sin palabras.
Allí el fútbol no es sólo deporte, espectáculo... Es algo más.


Después de una primera parte equilibrada y con el resultado tal y como empezó, se llega al tiempo de descanso. Una cerveza, y vuelta a nuestras butacas, que los goles están por llegar. Y así ocurre. Mediada la segunda mitad y tras una expulsión visitante, primero Benayoun y después Gerrard firman los dos tantos de los locales.

Reina durante el calentamiento
Saludos iniciales
Los jugadores del Wolves se conjuran. Torres, al tanto
Pitido inicial

22,30h: Muy satisfechos por lo visto, Rober y yo cogemos el coche en dirección al albergue. Pasamos junto al campo del Everton (el otro equipo de la ciudad), nos adentramos en el corazón de Livepool, llegamos a la zona portuaria y... Damos con él. Una vez habiendo dejado las cosas nos aproximamos al "Albert Dock", una de las atracciones turísticas más visitadas de Liverpool. Se trata de un emplazamiento marítimo declarado Patrimonio de la humanidad, una plaza cuadrada en cuyo interior hay agua (sí, agua) y donde los soportales que la rodean son un escaparate de lo mejor de la ciudad, pues se combina cultura, gastronomía y comercio.
Allí visitamos algún que otro pub, comentamos cómo ha ido el día y pasamos un buen rato, aunque eso sí, no tardamos mucho tiempo en abandonar, pues mañana toca regresar a Londres.